Usar demasiados productos al mismo tiempo

Sobrecargar tu piel con muchos productos puede causar irritación o brotes. Además, algunos ingredientes pueden anularse o generar reacciones adversas cuando se combinan. La clave está en mantener una rutina sencilla pero efectiva.

¿Cómo solucionarlo?

Algunas veces lo mejor es optar por una rutina básica: limpiador, hidratante y protector solar. Si querés añadir sérums o tratamientos específicos, incorporalos de a uno para ver cómo reacciona tu piel y dependiendo de su necesidad.

No elegir productos según tu tipo de piel

Un error común es comprar productos trendy o porque le funcionaron a otra persona. Pero debemos de saber que cada piel es diferente. Usar productos no aptos para tu tipo de piel puede llevar a problemas como acné, sequedad o exceso de grasa.

¿Cómo solucionarlo?

Identificá tu tipo de piel (seca, grasa, mixta o sensible) y elegí productos formulados específicamente para tus necesidades. 

Exfoliar en exceso o de forma incorrecta

La exfoliación ayuda a eliminar células muertas, pero hacerlo con demasiada frecuencia o usando exfoliantes agresivos puede debilitar la barrera protectora de la piel, dejándola sensible e irritada. 

¿Cómo solucionarlo?

Exfoliá de 1 a 2 veces por semana, dependiendo de tu tipo de piel. Lo mejor es optar por un exfoliante suave como Betagránulos ideal para usar en el rostro y cuerpo.

No esperar el tiempo suficiente entre productos

¿Sabías que aplicar los productos demasiado rápido puede afectar su eficacia? Algunos necesitan tiempo para absorberse y actuar correctamente.

¿Cómo solucionarlo?

Dejá reposar cada producto al menos 1-2 minutos antes de aplicar el siguiente, esto depende mucho de su textura y densidad. Esto permite que la piel los absorba mejor y evita que se mezclen.

Aplicar protector solar solo una vez al día

Uno de los errores más comunes es pensar que aplicar protector solar por la mañana es suficiente. La protección disminuye con el tiempo, especialmente si transpirás o te exponés al agua.

¿Cómo solucionarlo?

Renová el protector solar cada 2-3 horas. Productos como Umbrella Urban Protect o  Umbrella Base Compacta con un toque de color para utilizar como base, son perfectos para retocar durante el día sin arruinar tu maquillaje.

Ir a dormir sin realizar nuestra rutina de skincare

Aunque no uses maquillaje, la piel acumula impurezas, grasa y contaminantes del ambiente. Dormir sin lavar la cara puede obstruir los poros y causar brotes.

¿Cómo solucionarlo?

Incluí un limpiador suave en tu rutina nocturna. Por ejemplo, para pieles grasas o mixtas: recomendamos como limpiador Acleria Limpiador, en cambio, para pieles con tendencia a irritaciones o sensibilidad Lactibón Loción es la mejor opción.

Ignorar el cuello y el escote

Muchas veces cuidamos solo el rostro, pero el cuello y el escote también están expuestos al sol y al envejecimiento prematuro.

¿Cómo solucionarlo?

No te olvides de extender el perímetro de tu cuidado, siempre aplicá tus productos, tanto en el cuello como en el escote (hidratante, protector solar, serums).

No adaptar la rutina según la temporada

Tu piel tiene diferentes necesidades en verano e invierno. Usar los mismos productos todo el año puede no ser efectivo.

¿Cómo solucionarlo?

En verano, elegí texturas ligeras y geles refrescantes. En invierno, optá por cremas más nutritivas. Ajustá también la frecuencia de exfoliación y la cantidad de producto.

Corregir estos errores te ayudará a aprovechar al máximo tu rutina de skincare y a mantener tu piel saludable y radiante. Recordá que la constancia y los productos adecuados son la clave.

¿Necesitás ayuda para elegir los productos adecuados?

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